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La enfermera como elemento diferenciador en el cuidado de la salud mental de niños y adolescentes.
Hace 244 días

En el artículo, María Alcaraz, destaca el papel fundamental de la enfermería enfermera en la atención a la salud mental infantil y juvenil en España, un país con una alta prevalencia de problemas en este ámbito. Según el Barómetro de Opinión de la Infancia y la Adolescencia 2023-2024, el 41% de los adolescentes ha experimentado o cree haber experimentado un problema de salud mental en el último año.
El informe «Trabajando por la Salud Mental de niños, niñas y adolescentes: Retos y desafíos a través de los cuidados especializados enfermeros», elaborado por la Asociación Española de Enfermería de Salud Mental (AEESME), subraya la importancia de la enfermería en la prevención, detección y tratamiento de diversas problemáticas como los trastornos de la conducta alimentaria (TCA), autolesiones y suicidio, adicciones, episodios psicóticos tempranos, trastornos de la conducta y la condición del espectro autista.
En el abordaje de los TCA, se destaca la necesidad de una perspectiva holística e integral, ya que la adolescencia es una etapa de vulnerabilidad. En la prevención de autolesiones y suicidio, las enfermeras desempeñan un papel clave en entornos comunitarios y escolares mediante la búsqueda activa de jóvenes en riesgo, la implementación de programas de salud pública y la capacitación de docentes y estudiantes para detectar problemas emocionales. Además, el informe resalta el impacto de las redes sociales en la salud mental juvenil y la necesidad de que las enfermeras intervengan en este ámbito para fomentar un uso adecuado.
En cuanto a las adicciones, el informe evidencia una falta de formación y capacitación específica para las enfermeras en este campo, lo que limita su capacidad de brindar cuidados adecuados tanto a los afectados como a sus familias. También se analiza la importancia de atender el malestar psicoemocional temprano en la infancia y adolescencia, señalando que este puede tener consecuencias más allá de lo emocional, afectando también la salud física. Como estrategia efectiva, se propone el desarrollo de espacios grupales liderados por enfermeras, favoreciendo el apoyo y la educación emocional en un entorno seguro.
El informe concluye que la enfermería es un pilar esencial en el cuidado de la salud mental infantojuvenil y que su labor debe fortalecerse mediante formación especializada, protocolos de actuación más integrales y una mayor presencia en ámbitos comunitarios y educativos.
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